Plataformas online reviven el arte del trueque, permitiendo a los usuarios intercambiar bienes y servicios sin dinero de por medio.
En un mundo marcado por el consumo y la inflación, el trueque digital surge como una alternativa innovadora para quienes buscan ahorrar, reciclar y consumir de forma responsable. Aplicaciones y grupos en redes sociales permiten a las personas intercambiar todo tipo de productos, desde ropa hasta muebles y tecnología, sin usar dinero. La modalidad también se extiende a servicios: clases de idiomas a cambio de asesoría en marketing, sesiones de yoga por arreglos de jardinería. Este fenómeno crece especialmente entre los más jóvenes, que valoran la economía circular y la posibilidad de darle una segunda vida a los objetos. Aunque el trueque siempre ha existido, la tecnología lo ha llevado a una escala global, transformándolo en un movimiento con impacto social y ambiental.